Chequilla, una escondida joya serrana que hay que conocer


Siempre vuelvo a Chequilla. Pasear por sus calles o sus alrededores genera una agradable sensación, mezcla de tranquilidad y armonía, que produce que, a menudo, quién lo ha realizado no solamente no le importe volver, sino que quiera hacerlo. Así lo he constatado en numerosas ocasiones. Personas que no conocen inicialmente nuestras Sierras y hacen algún recorrido por las mismas pueden olvidar algunos sitios, pero siempre recuerdan Chequilla si esta población estuvo en su ruta.

Varios son los factores que provocan que este maravilloso lugar guste a propios y a extraños. El primero, sin duda, es la belleza de su entorno. En este artículo me centraré mucho en el impresionante modelado geológico responsable de tantísimo encanto como el que allí puede sentirse a flor de piel. Es una belleza, además, cercana y accesible, de un tipo difícil de encontrar. No sobrecoge ni empequeñece al observador. Simplemente configura un lugar en el que lo cotidiano parece mágico y en el que la alegría fluye con facilidad.

La primavera serrana en el objetivo de nuestros grandes fotógrafos

Gamón en flor

La primavera avanza. En nuestras tierras es la estación del año que más se está distorsionando en los últimos años, sobre todo porque el tiempo veraniego suele adelantarse en el calendario. Para no ir más lejos, este año ya han caído muchas temperaturas máximas históricas en el mes de mayo. El año, además, está viniendo seco. A estas alturas ya no cabe esperar una gran corrección, al menos de momento. Nuestros campos tirarán de las rentas hídricas de los años anteriores.

Por cierto, en la zona PuraSierra tenemos personas con enormes conocimientos meteorológicos e informáticos, las cuales se ocupan de que tengamos mediciones exactas en tiempo real de los principales indicadores del tiempo en diversos puntos serranos. Están acostumbrados a batir records nacionales, sobre todo en lo que se refiere a temperaturas mínimas invernales. Algunos ejemplos los tenemos en los Blogs de Drakis y de Meteotrassierra, además de la página Meteovegadelcodorno.


Toponimia: Sobre ciervos, gamos, corzos, muflones, jabalíes y cabras monteses

Corzo. Fotografía 1

No ha sido fácil titular este artículo. Puestos a hablar sobre los seis animales que se citan en el mismo, el primer planteamiento es cómo definirlos sin necesidad de citarlos todos y así hacer un encabezamiento más corto. Ninguna de las opciones barajadas nos ha convencido totalmente, motivo por el cual aparece la lista completa y, por lo tanto, no hay error posible.

No cabe duda de que todos esos animales comparten muchas características. Por ejemplo, todos viven libremente en nuestras Sierras, son muy conocidos por sus habitantes, están perfectamente integrados en el medio natural, son mamíferos y son codiciados, aunque con diferentes objetivos, por ciertos fotógrafos y miles de cazadores. Sin embargo estas no les hacen únicos. Hay otros animales que también las cumplen, como por ejemplo el zorro, tratado por PuraSierra en el artículo Toponimia: El zorro, ese gran conocido. Incluso serían discutibles los casos del oso o el lobo, respectivamente descritos en Las huellas del oso en nuestra toponimia. El Hosquillo y los osos serranos y El lobo: Historia, toponimia y su previsto retorno.


El Hosquillo: Geografía y breve historia de un lugar privilegiado

Cascada del Rincón Del Buitre (Río Escabas)

Bastantes más de seiscientos años han transcurrido desde que Alfonso XI de Castilla escribiera, u ordenara escribir, su Libro de la montería que mando escrevir el muy poderoso Rey Don Alonso de Castilla y de Leon, vltimo de este nombre. Como ya comentamos en PuraSierra en el artículo Las huellas del oso en nuestra toponimia. El Hosquillo y los osos serranos, muchos lugares de nuestra zona tenían ya en ese tiempo el nombre que aún conservan. Es el caso de El Hosquillo, emblemático lugar serrano del que hoy vamos a hacer algo de historia.


Geología serrana práctica. El relieve kárstico, dominador de nuestros paisajes

Hoz De Beteta (Río Guadiela)

En este artículo vamos a realizar una introducción a la geología serrana. Los paisajes que contemplamos, el clima del que disfrutamos, la evolución humana de nuestras gentes a través de los tiempos y, en general, cualquier aspecto que tenga que ver con esta tierra, son producto indiscutible del modelado geológico que ha dado como resultado, tras millones de años de transformaciones, lo que hoy definimos como zona PuraSierra. Por ello es importante comprender de dónde procede cada cosa que la naturaleza nos ofrece y el motivo por lo que ha llegado hasta nuestros días tal y como hoy la vemos.


El pino laricio, primordial en la botánica serrana

Pino Candelabro (Torcas De Los Palancares, Cuenca)

Entre los diferentes tipos de pino serranos hay uno que es el que ofrece los ejemplares más elevados de nuestras Sierras. Se trata del pino laricio, también conocido como pino salgareño o pino negral. Seguramente la última es la denominación serrana más utilizada, pero a veces ese nombre se atribuye también a otras especies de pino.


El pino albar, rey de las alturas

Pino albar en el Santuario de Nuestra Señora Del Tremedal (Orihuela Del Tremedal)

En PuraSierra sabemos que los pilares sobre los que se basa el carácter de estas tierras son el agua, la roca y el bosque. Tal y como comentamos en ¿Qué es PuraSierra? son los tres visibles elementos naturales que, con una abundancia excepcional, han definido siempre la personalidad y la dura forma de vida de sus gentes.

En referencia concreta al bosque, a nadie se le escapa que por estos lares el árbol dominante es el pino, y del pino vamos a hablar en este primer artículo de los varios que le dedicaremos. El factor inicial que dividirá unos de otros es el tipo de pino que consideremos en cada uno de ellos.


Dieciséis setas serranas de primavera


Este artículo forma parte de una serie que en PuraSierra comenzó con el titulado Las setas: Generalidades, hongos serranos más populares y toponimia, al cual siguió otro identificado como Treinta setas serranas que hay que conocer. Ambos fueron publicados en tiempo de otoño.

Es de todos conocido que al llegar la primavera en la naturaleza se altera casi todo, y no sólo la sangre de ciertos mamíferos. En el mundo micológico, como no podría ser de otra forma, pasa lo mismo. En zonas frías, como lo es la nuestra, comienzan a proliferar de nuevo las setas. No es que en invierno no las haya habido, porque haberlas, haylas a lo largo de todo el año, pero en esa estación ni suelen ser abundantes ni fáciles de localizar.

Toponimia del habla serrana: Con todo el respeto, sobre Tías y Tíos

Paneles informativos de parajes serranos con la palabra "Tío" o "Tía"

En la fotografía de cabecera vemos cuatro carteles públicos que presentan cuatro sitios singulares de la zona PuraSierra. Dispuestos por las autoridades en los correspondientes parajes, orientan a sus lectores sobre cuestiones propias de los mismos. Por lo tanto, todos esos lugares tienen en común que son lo suficientemente importantes para que al viajero, turista o paisano se le aporte algún tipo de información que intente satisfacer su curiosidad.


Casas De Frías, Villanueva De Las Tres Fuentes y Rento De La Peraleja, tres despoblados para conocer

Vista de Casas De Frías

En bastantes ocasiones nos hemos referido en PuraSierra a la despoblación, principal problema social que se cierne sobre nuestra zona. En concreto, en el artículo Nuestras doce poblaciones pobladas más despobladas hablamos sobre los doce núcleos aún habitados que, debido a su escasísimo número actual de ocupantes, más riesgo corren de acabar convirtiéndose en lo que comúnmente se conocen como pueblos abandonados, aunque aquí preferimos llamarlos Despoblados.


El boj, la planta amiga: Características, usos y toponimia

Bujedal cercano a Valdemeca

Al pensar en el boj, lo primero que se me viene a la cabeza, como he citado en el título, es que es una planta amiga. Cualquiera que haya caminado mucho campo a través por nuestros montes, tanto en pendiente como en llano, se habrá encontrado en muchas ocasiones con que la maraña entre la que tiene que avanzar es casi impenetrable. Multitud de arbustos, muchos con temibles espinas, otros pegajosos y otros muy leñosos, dificultan el paso. Seguir adelante se vuelve entonces complicado y hay que hacerlo muy lentamente, no sin sufrir enganches y pinchazos, siempre mirando detenidamente las plantas que tenemos muy pocos centímetros por delante. Normalmente el agobio acaba en cuanto vemos al amigo boj. Sus flexibles ramas y sus pequeñas y frescas hojas convierten el martirio anterior en una agradable caricia natural, ante todo porque ya podemos caminar con libertad total sabiendo que, al menos por unos pasos, nosotros y nuestras ropas tendremos un aliado.


El Río De La Hoz Seca: Visión geográfica y fotográfica de su tramo final

La Campana

Es tarea difícil encontrar en España un curso de agua de más de 30 kilómetros tan serrano como el Río De La Hoz Seca. Este supera los 32 y no hay ningún punto de su cauce que se encuentre a menos de 5 kilómetros de algún lugar habitado. Ni una sola de las poblaciones más cercanas (Bronchales, Orea, Checa, Orihuela Del Tremedal, Peralejos De Las Truchas, Griegos y Chequilla) realiza vertidos en sus aguas. Una vez más, como tantas y tantas otras, en la zona PuraSierra serrano es sinónimo de puro.

Podemos encontrar su nombre escrito de muy diferentes formas, aparte de utilizada en el título de este artículo. Lo vemos como Río Del Puerto, De La Hoz Seca, Hoceseca, Oceseca y de otras formas más o menos libres. Eso sí, todas menos la primera hacen referencia a los muchos meandros encajados que en su curso medio forman estructuras orográficas con nítidas formas de hoz profundamente talladas en la tierra.